Debuta hoy Dinamarca en la Eurocopa, y “la dinamita roja” se las tendrá que ver contra la selección de otro país nórdico: Finlandia.
Dinamarca sorprendía en las grandes citas con un estilo ofensivo y atrevido, por un fútbol de ataque basado en el talento y la calidad de muchos de sus futbolistas. Una selección elegante, bonita de ver, temida, pero que no llegaba a estar entre las grandes. Sin embargo, en el verano de 1992, y bajo la dirección de Richard M. Nielsen, logró conquistar la Eurocopa con un estilo bastante más conservador y resultadista. Uno de los héroes de aquella selección que sorprendió en aquel verano inolvidable fue el delantero Flemming Povlsen.
Nacido en Brabrand en 1966, tras despuntar en el Aarhus fichó por el Real Madrid en 1986, con tan solo 20 años. Permaneció un año en el Castilla logrando 10 goles, pero sin oportunidades de debutar en el primer equipo decidió fichar por el Colonia alemán. De allí pasó al PSV Eindhoven y finalmente se consolidó en el Borussia Dortmund en la primera mitad de los 90. En Dortmund mostró su instinto goleador, también en la selección danesa, siendo el principal referente en ataque, pero en 1993, en su mejor momento de forma, una grave lesión en los cruzados le apartó de los terrenos de juego. Se retiró demasiado pronto, y aunque después de dos años en el dique seco volvió a su Brabrand natal, ya no fue el mismo delantero de antes. Aquel que tuvo su momento de gloria en la Eurocopa de 1992.
Debe estar conectado para enviar un comentario.