J26: O Rey Vinícius

Vinícius José Paixão de Oliveira Júnior es un delantero brasileño de 19 años que llegó al Real Madrid hace unos años como una de las mayores promesas del fútbol mundial y que desde entonces ha sido sometido a una brutal presión por medios y aficionados que examinan con lupa cada jugada que realiza. Con la etiqueta de fallón sale al verde cada partido a demostrar y a demostrarse a sí mismo el pedazo de futbolista que es y que puede llegar a ser. Ayer hubo clásico (un Madrid-Barça de toda la vida, vamos), y de los más de veinte futbolistas que participaron en el encuentro tan solo uno provocaba sensaciones diferentes cuando manejaba el balón. Ese era el Rey Vinicius, que cada vez que poseía el cuero creaba peligro con sus internadas desde el extremo izquierdo, y que a pesar de su juventud, se tiró el equipo a la espalda y calló las bocas de sus detractores. 

Vinícius es electricidad, ímpetu, desborde y desparpajo, también es anarquía en medio de tanto fútbol académico de pasecitos y búsqueda de superioridades, un joven que levanta y levantará traseros con sus veloces internadas, un futbolista por el que bien mereció ver posiblemente el Madrid-Barça con menos calidad de lo que llevamos de siglo. Vinícius es un oasis, una especie en peligro de extinción, y anoche firmó la actuación que necesita todo crack en busca de su consagración. En un partido igualado que iba a ganar el primero en encontrar el marco rival, fue Vinícius quién más insistió en ello, y su gol desatascó un partido que devolvió el liderato de esta Liga Moderna a un Real Madrid que venía de perder en Liga y en Champions, y que hubiera sufrido un golpe tremendo si ayer hubiera cosechado otra derrota. Pero las cosas cambian, hoy se ven líderes y motivados, y lo más importante, con la certeza de que tras la victoria de ayer han recuperado un futbolista que tiene cuerda para rato. O dos, porque a la exhibición con gol del brasileño hay que sumar el gol de Mariano en el descuento, un delantero con el que nadie ya contaba y que rentabilizó al máximo los tres minutos que le dio Zidane para reivindicarse y poner en la encrucijada de paso a su técnico. Bendito problema, el Madrid, tras perder a Hazard por lesión, gana ahora confianza. 

El Barça mientras tanto se apena de no rematar a un equipo que llegó al descanso agonizando. El fútbol es así, se le dio vida al Madrid y ahora los blancos tienen la Liganen sus manos.

Los dos grandes se jugarán la liga en sus doce próximas finales, ambos han demostrado ser dos equipos en transición con más carencias que virtudes, con bastante escasez de talento y con demasiadas imprecisiones. Pero las diferencias con el resto de quipos de la Liga siguen siendo abismales, ganará el que se tome esto más en serio, y diremos que es el menos malo, o el mejor de todos, que viene a ser prácticamente lo mismo. 

A parte del duelo por el título de Liga, se espera una dura lucha por las plazas de Champions, plazas europeas y por no ocupar los puestos de descenso. Probablemente el fútbol sea más justo que antes, pero hay mucha más tontería, y en esta jornada, además de la corona de Vinicius, ha brillado la polémica arbitral, especialmente en las jugadas de manos dentro del área que nadie entiende, y que terminá por provocar que los delanteros chuten en dirección a los brazos de los defensores en vez de buscar portería. Sobre penaltis de chichinabo escribimos prácticamente cada semana y, nos cansa tener que tragar con este fútbol de revisiones de jugadas que a priori no llevaban ningún peligro. Se revisan los brazos tontos pero no los agarrones claros dentro del área, esto no hay quien lo entienda. 

Al Sevilla le pitaron en contra uno de esos penaltis por brazo tonto contra Osasuna, pero al final En-Nesyri hizo vibrar el Sánchez-Pizjuán con su gol en el descuento. Antes ya había marcado uno, pedazo de futbolista el marroquí, que sigue ayudando con sus goles a que el Sevilla ocupe ya la tercera plaza. Está todo muy reñido en la zona Champions, el Getafe sigue sin cesar en su temporada soñada, ganó en Mallorca y adelanta a un Atlético de Madrid al que fuera de casa le cuesta barbaridades conseguir los tres puntos. Empataron los colchoneros en Cornellà, y gracias, porque el portero Oblak volvió a estar excelso y ya hemos dicho que los agarrones en el área no lo revisan estos jueces locos. Al final el punto se tuvo que dar por bueno. 

Espanyol y Mallorca por su parte, perdieron otra oportunidad de sacar más puntos y siguen ocupando posiciones de descenso, ya hace tiempo que ambos van contra reloj, en casa ya no se puede fallar más. 

Luchando tras el Atlético por los puestos europeos vienen RealSociedad y Valencia. Ambos ganaron en su casa, la Real Sociedad se deshizo del Real Valladolid gracias a un gol de preciosa jugada anotado por Januzaj; y el Valencia venció a un Betis que encadena ya siete partidos sin conseguir la victoria y se acerca irremediablemente a la zona baja de la tabla. Y la próxima semana el Real Madrid del Rey Vinicius visitará el Villamarín, puede haber tormenta en el club de las trece barras. 

Hubo penaltis para tontos también en San Mamés, allí Athletic y Villarreal disputaron un choque para seguir soñando en reengancharse al grupo que persigue Europa. Vaya penalti le pitaron al pobre a Pau Torres, en fin el fútbol de parones e interpretaciones del que tanto vamos hablando en las últimas jornadas. Antes que ver este tipo de penaltis preferimos mil veces el fútbol injusto de la mano de Dios, el gol fantasma del 66, y el no gol de Míchel, eso era fútbol o incluso algo más que fútbol. 

El Granada pensó en la Copa y no pudo batir al Celta en Los Cármenes. Un punto más que suman los de Vigo y que es bueno siempre que los de abajo no saquen tres, y así fue. El Granada tiene la temporada casi hecha, y después de un espectacular arranque de Liga, ahora todo se centra en remontar el partido de vuelta ante el Athletic y meterse en la final de la Copa del Rey. 

El Eibar le endosó un 3-0 al Levante y consigue un poco de ventaja para salir de la parte oscura, la del descenso, donde sigue inmerso el Leganés, que tampoco consiguió ganar su partido en Butarque contra el Alavés. 

A Leganés, Mallorca y Espanyol les sigue costando demasiado conseguir un triunfo, pasan las jornadas pero sigue el sufrimiento. En esta Liga Moderna nadie se puede relajar, nadie. Ni el nuevo Rey del fútbol, ni los defensas con sus brazos, ni Leo Messi, que pasa de marcar cuatro a que le llamen ex-futbolista, así es el jodido fútbol moderno, tan pronto te ponen corona como te crucifican. 

Collage moderno, técnica mixta