Johannes Franciscus Van Breukelen

En 1988 el PSV Eindhoven y la selección holandesa dominaron el panorama europeo, fueron campeones de Europa, y en parte gracias a un portero que en aquellos años estaba en un gran momento de forma, un portero con nombre poderoso, Hans Van Breukelen, que a muchos nos sonaba como a Black & Decker, como que podía con todo.

Y es que Van Breukelen era un portero fuerte, con cara de pocos amigos, que se revolcaba por el barro que decoraba antaño las porterías atajándolo todo, y fue uno de los grandes porteros de los 80, de los que intimidaban con solo escuchar su nombre. Jugaba para el Utrecht cuando lo fichó el Notthingam Forest como sustituto de Peter Shilton. En Inglaterra se lesionó gravemente y volvió a Holanda tras dos temporadas para defender la portería del PSV Eindhoven, y en el equipo de la Philips levantó la orejona unas semanas antes de ganar la Eurocopa también con la selección, junto a Rijkaard, Koeman, Gullit, Van Basten y compañía. En la final de la Euro paró un penalti al balón de oro del 86, el soviético Igor Belanov. Y es que Hans era un gran atajador de penaltis, siendo siempre clave en los títulos que ganó.
Se retiró en 1994 en las filas del PSV Eindhoven, donde es considerado toda una leyenda.

Van Breukelen en la colección de cromos de Panini para la Euro 88