Fue un delantero galés de mucho tamaño, que destacó en el Cardiff City en la década de los 60 y en el gran Liverpool de los 70, con el que ganó 2 Copas de Europa, 2 Copa UEFA, 3 Ligas y una Copa inglesa entre otros títulos.

Conectó muy bien con el inglés Kevin Keegan, con el que se asociaba casi telepáticamente. En 1978, fastidiado por las lesiones, fichó por el Swansea, donde actuaría como entrenador-jugador consiguiendo con el club galés un ascenso meteórico. En 1985 llegó al banquillo de la Real Sociedad después de trabajar un año en el Sporting de Portugal.

En San Sebastián J.B se sintió como en casa durante cuatro temporadas, consiguió ganar la Copa en 1987 con el club txuri-urdin y fichó por el Real Madrid en 1989. Construyó un equipo muy ofensivo y ganó la Liga de manera brillante, pero en la temporada siguiente fue cesado al principio del campeonato. Volvió a la Real, fue seleccionador de Gales, también sería el sustituto de Arsenio en el Superdépor, pasó por el Besiktas y volvió en 1999 al Real Madrid donde dejó buenos momentos en las ruedas de prensa. Siguió entrenando, trabajó de nuevo en la Real Sociedad y en la selección galesa, además de aventurarse a entrenar en países como Macedonia o Azerbayán.

Un atrevido del fútbol, un cabrón simpático y uno de los entrenadores más míticos de la Liga.