Natxo Groundhopper

Ignasi Torné, conocido como Natxo, es un apasionado del ambiente futbolero que ha hecho de su pasión su modus vivendi. Hace ya diez años que va desde Barcelona saltando por las gradas de los estadios más impresionantes del mundo, ahora, este catalán es ya todo un “Groundhopper”, que es como se conoce a estos coleccionistas de estadios que indagan en las entrañas del fútbol. Carrete en mano y bolígrafo en el bolsillo, Natxo nos acerca con sus fotografías y con sus textos el sentir de su pasión esférica. Ha escrito en medios como Panenka, y como freelance viaja allá donde el corazón le lleva a relatar algo sobre su vocación redonda. Un corazón leproso con sentimiento carbonero, empapado de fútbol ha encontrado especialmente en Uruguay y Argentina el sentido de sus viajes. Cuando no se desplaza a descubrir nuevas gradas lo podemos encontrar animando al Sant Andreu, y nosotros, tras seguir sus saltos, hemos conseguido capturarlo para someterlo a nuestras diez preguntas y media. Es un honor que un romántico como Natxo, experto de las grada y la cancha, nos dedique parte de su alocado tiempo.

http://groundhopperbarcelona.com

¿Qué tiene el fútbol sudamericano que no tenga el europeo?
La autenticidad, lo elemental y, a veces, rudimentario. En muchos casos puede que no haya recursos
económicos, pero se hace todo con el corazón y se llega. Vaya si se llega, de lo impensable se hace una
realidad. El fútbol uruguayo es uno de los mejores ejemplos, llegar a lo más alto produciendo talento
local casi de la nada, dejando de lado lo gigantes que son Peñarol y Nacional. Me encanta saber que si
Flamengo o River Plate van a jugar a Bolivia tengas la certeza de que palmarán. Eso es la condición de
jugar como local. Por otra parte, el sentido de ‘club’, totalmente desvirtuado y olvidado en Europa. Como
socio de Newell’s Old Boys, yo hacía vida en el club. Juegas al futbito, haces asados con la banda y vas
al gimnasio y en verano a la piscina. No és únicamente pagar cuota para ver el fútbol.

¿Se escucha algo en un estadio vacío?
Creo que Galeano tiene toda la razón del mundo cuando escribió sobre un estadio vacío. De todas
formas, todos nosotros hemos jugado sin nadie que nos mire, ni mucho menos que nos anime. Ante la
ausencia de los hinchas, creo que el ruido de trote, la bota del portero segando el césped cuando lanza,
las onomatopeyas de los choques y las faltas, el patadón que se escucha hasta en el pueblo del al lado y
el típico “no la esperes” conforman mi gran escenario futbolístico.

¿Crees que el fútbol actual reprime al aficionado de grada?
Totalmente. Yo recuerdo el Calderón vestido de gala con decenas de banderas de peñas, mensajes de
ánimo o el escudo en el centro. Ahora en el Metropolitano ya no hay, son banners publicitarios. Creo que
ha sido tan paulatinamente que el aficionado ni se ha dado cuenta. Es el momento que clubes como el
Barça u Osasuna prohiban ceder el abono a otra persona

¿Cómo pasa un finde un hincha como tú?
Depende si viajo o no. Si me muevo me encanta visitar y conocer la ciudad, sacar fotografías y disfrutar
de la gastronomía. Préviamente, casi siempre contacto con el club para realizar el stadium tour y visitar
el museo, empaparme un poco de donde estoy y qué me espera en el campo. Me pongo bastante
nervioso cuando es día de partido, la ansiedad de pensar que todo me salga bien, llegar al estadio, tema
entrada y bufanda, dónde me puedo meter para sacar fotos del ambiente y si he quedado con alguien
para ir al partido. Me dejo llevar bastante e intento sacar una experiencia 100% auténtica y local. Si la
gente toma sambuca, si hay un puesto de choripanes después del partido o una pinta de Brown Ale en
un pub. En Barcelona voy a ver al Sant Andreu, me encanta. Es todo lo que no he encontrado en años
en el Camp Nou. Entrar al estadio y conocer a la gente, perderme la primera parte porque me pongo al
día con otros parroquianos.
Cada vez veo menos fútbol por televisión, y me gusta mucho. Pero cada año la plataforma de pago es
diferente, igual no me incluye partidos de competición europea o únicamente la Premier League. A mí
me gusta el calcio, la Copa Libertadores y la Sudamericana, la Primera División de Argentina,
obviamente, y la Europa League. También me interesa mucho el fútbol de los Balcanes, pero es un poco
difícil seguirlo.

¿En qué estadio te quedarías a vivir?En el Estadio Centenario de Montevideo, sin lugar a dudas. Ojo con el “cottage” que da nombre al estadio del Fulham FC, parece bastante acogedor.

Tuviste el honor de conocer al Trinche, cuéntanos algo sobre él ¿cómo lo definirías?
Él se definió como una persona con un perfil bajo, que no le gustaba hacer demasiado ruido. Creo que
esa personalidad fue la tónica de su vida, tanto en los personal como jugando al fútbol. Por eso hay poca
información sobre su persona, alimentando la leyenda en torno a su figura. Creo que la idiosincracia de
Rosario y la identidad de los rosarinos hacen del Trinche algo genuino y singular en todos los aspectos.
“Con el Trinche es un precio. Sin el Trinche es otro” creo que contextualiza bien lo que generaba
Carlovich.

¿Qué es lo que más te fastidia del fútbol moderno?
¡Uh! Tantas cosas que no sé ni por donde empezar. Que todo esté tan controlado, medido y planificado.
Que la mayoría de jugadores están pensando cómo celebrar el gol antes de rematar. Que la experiencia
de vivir el fútbol la mayoría de veces se come a la vivencia del fútbol, que estés más pendiente de grabar
el “You’ll never walk alone” en Anfield que de cantarlo y disfrutarlo con la bufanda. Yo soy el primero que
me gusta tener fotos del partido, básicamente me dedico a esto, pero intento siempre que mi objetivo
principal sea captar lo que me ha llevado a estar ahí y disfrutarlo, supongo que por eso no soy youtuber.
Siempre pongo de ejemplo cuando fui a la popular de Boca, mi primera vez en La Bombonera y no tengo
una foto de esa tarde.
A todo esto, me cuesta barbaridades ver el fútbol sentado, lo odio. Incluso cuando quedo con mis amigos
para ver un partido en la tele, casi siempre estoy de pie.

¿Y lo que más te gusta del fútbol actual?
Las redes sociales, poder visitar los estadios y los museos de los diferentes equipos. Soy coleccionista
de camisetas, cuando viajo compro la del equipo local o el que más me simpatiza. Poder viajar e
informarme bien de los partidos que hay durante un finde y contactar con hinchas locales. Sin embargo,
como consumidor de fútbol por televisión me flipan las repeticiones de jugadas con slow motion.

¿Qué piensas de los macroestadios de ahora?
Que la mayoría son todos iguales y algunos llegan a ser muy impersonales. No quiero caer en el tópico
de catalogarlos como ‘centros comerciales’ porque entiendo que se busque diversificar las actividades y
funciones en un estadio sin olvidar el sufijo ‘de fútbol’. Tampoco me gusta la ubicación, muy lejos del
centro pero por motivos obvios del crecimiento de las ciudades y el coste de los terrenos, teorizo. Es muy
complicado encontrar un San Mamés, un St. James Park o un Mestalla.

¿Qué opinas de la tecnología y el VAR?
Yo ya no sé ni qué es un fuera de juego, ni cuando son manos o son involuntarias.


-Un futbolista antiguo preferido: El Trinche Carlovich


Uno moderno: Me flipa Gabigol y amo a Fede Valverde.

-Tu camiseta de fútbol preferida: La ‘Maglia Bandiera’ de la Lazio, estéticamente me parece
espectacular, potente y eterna. Los mejores equipos para camisetas siempre son Newcastle
United, Olympique de Marsella y el Club América.


-El equipo con el que más disfrutaste viéndolo jugar: El Athletic Club de Marcelo Bielsa.


-Una canción que te mole: La que canta la hinchada de Peñarol “Amanecí con ganas de venir a
verte”.

Natxo, en La Bombonera