La Liga continua y hoy se enfrentan dos clásicos de nuestro fútbol, Atlético de Madrid y Betis. Varios futbolistas han tenido el orgullo de vestir la rojiblanca y la verdiblanca, así que vamos a recordar a un defensa central, de los mejores de su época, que tuvo el honor de jugar en los dos equipos.
Roberto Solozábal era el capitán del Atlético de Madrid en el famoso año del doblete, convertido ya en todo un líder criado en la casa. Subió al primer equipo en 1989, y pronto se afianzó, era un central con buen manejo del balón, rápido, atento y limpio, pues no conoció la expulsión en sus 282 partidos en Primera División.
Fue campeón olímpico en Barcelona 92, donde además anotó un gol. Formó buena pareja de centrales junto a Juanma López o Santi Denia. Era uno de los preferidos de Gil y de la afición atlética, por su constancia y capacidad de líder, y también muy respetado por los rivales. Tras acabar un ciclo en el Atlético jugó 3 temporadas en el Betis, retirándose en el 2000 con apenas 31 años.
“Estaba asqueado de muchas cosas que vi en el fútbol”
Dejó el balón y se hizo todo un ironman que domina cualquier deporte, especialmente los de montaña, y cuando puede todavía ve algún partido de fútbol moderno como el de hoy.

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